Las instalaciones de lavado de vehículos son muy comunes en gasolineras, estaciones de servicios o centros comerciales. Cada vez son más frecuentes y todas las poblaciones tienen un espacio destinado a ello.
En un lavadero de coches también existe riesgo de contagio por legionella, y como toda instalación de agua por pulverización, se debe tratar.
Contagio de legionella en sistemas de lavado de vehículos
Este tipo de sistema de lavado pulveriza el agua produciendo aerosoles. Por ello, el Real Decreto 865/2003 contempla esta instalación como “Otros aparatos que acumulen agua y puedan producir aerosoles”.
De este modo, se establecen los criterios higiénico-sanitarios para la prevención y control de la legionelosis en los lavaderos de coches. Esta instalación, concretamente está catalogada como una instalación de “menor probabilidad de proliferación y dispersión de Legionella”, pero igualmente de tratamiento obligatorio.
Además recientemente, se conoció la noticia del brote de legionella en un lavadero de coches en Sevilla. De la que se contagiaron 8 personas, dos de ellas ingresaron en UCI.
A todos estos datos, añadimos también la evolución de las máquinas de lavado. Se ha pasado de lavar los coches a mano o con mangueras a utilizar agua a presión.
Las pistolas de agua a presión hacen que el polvo y la suciedad adherida al vehículo se eliminen mejor. Además, se ha pasado a realizar el lavado con dos tipos de agua, una para la fase de lavado y otra desmineralizada para la fase de enjuagado.
Las exigencias medioambientales también obligan a los lavaderos de coches a llevar a cabo medidas como la reutilización del agua. Se puede llegar a ahorrar hasta un 75% del agua usando parte de las aguas residuales depuradas y recicladas de algunas fases de lavado.
Mantenimiento de la instalación
Para hacer posible todo lo anterior, los criterios básicos de actuación deben garantizar que el agua de aporte sea de una calidad bacteriológica adecuada. Por otro lado, el mantenimiento de la instalación debe permitir la limpieza y desinfección de las partes más susceptibles de contaminación.
Para mantener los lavaderos de coches en adecuadas condiciones hay que evitar:
- Largos periodos de paro, ya que favorecen el estancamiento de agua y la proliferación de microorganismos.
- Depósitos de agua sobredimensionados, se favorece igualmente el agua estancada.
- Volúmenes de agua inadecuados, cada tipo de máquina tiene un máximo de litros para su funcionamiento.
- Exponer al sol los depósitos de agua, pues pueden alcanzar temperaturas elevadas que favorezcan la proliferación de microorganismos.
Además, la realización de la desinfección de legionella es de obligado cumplimiento. Durante el tratamiento se deben extremar las precauciones para evitar que se produzcan situaciones de riesgo entre los ocupantes de las instalaciones a tratar.
Una vez se ha hecho el tratamiento, se debe llevar un seguimiento y revisión de la instalación semanal, mensual y anual. De esta forma mantenemos el control y la calidad adecuada del agua.
Traconsa, como empresa profesional en tratamientos DDD, lleva a cabo la desinfección de legionella en lavaderos de coches y depósitos de agua de distintos litros. Con personal experto y productos biocidas certificados por el Ministerio de Salud.